Comenta cuál de los argumentos principales a favor del realismo (argumento del no-milagro) y en contra del realismo (meta-inducción pesimista) te convence más, y cómo se relacionan entre ellos.
Uno de los hitos científicos de esta última década es la primera detección en el CERN del bosón de Higs. Era la pieza que faltaba para demostrar la veracidad del Modelo Estándar de Física de Partículas: la partícula que explica el origen de la masa en el universo. Su existencia se predijo en los años 60 del s. XX. Medio siglos después se demostró que era cierto.
El bosón de Higgs ha resultado ser una teoría exitosa y, por tanto, una descripción verdadera . Si no fuera así, que las cosas tengan masa y que el universo sea como es no tendría explicación, sería algo milagroso. La verdad de la existencia del bosón de Higgs es la opción más probable que explica el indiscutible éxito del Modelo Estándar de Física de Partículas.
Visto desde el punto de vista de la meta-inducción pesimista, podría decirse que otras teorías del pasado también se tuvieron por verdades en su momento, que el éxito de una teoría a la hora de explicar algo no significa que sea cierta, ya que nuevos descubrimientos tiempo después pueden demostrar que era incorrecta. Pero…¿Podemos comparar el descubrimiento del bosón de higgs a la astronomía ptolemaica? ¿El éxito empírico de las teorías actuales no nos permite inferir si son verdaderas?
La cuestión es que en el pasado había una proporción de teorías científicas falsas con respecto a las teorías verdaderas que, a mi entender, no se mantiene en el presente gracias al desarrollo de la ciencia. La meta-inducción pesimista desconfía del valor que tiene el éxito de una teoría como indicio de veracidad. Sin embargo, la ciencia ha ido elaborando cada vez más teorías verdaderas. El argumento del no milagro que apoya el realismo científico me parece más apropiado para explicar la relación entre ciencia y verdad.
Lee el pasaje de Ian Hacking y comenta el fragmento marcado en amarillo (pag 41): “A partir de ese día he sido un realista científico. Hasta donde a mi concierne, si se puede rociar algo con ellos, entonces son reales”.
Ian Hacking expresa con el relato de este experimento su acercamiento a la postura del realismo científico, que postula que el objetivo de las teorías es la verdad, o acercarse a ella de la forma más aproximada posible. Para conseguirlo, los conceptos que se mencionan en la teoría deben existir, como ocurre, en este caso, con los electrones. Un experimento, o sea, la observación de un fenómeno, determina en este caso la existencia real de los electrones. Los electrones forman parte de las herramientas utilizadas para llevar a cabo el experimento, pueden ser manipulados, por lo tanto, su realidad, su existencia, es un hecho. La entidad teórica, en este caso el electrón, se puede manipular para realizar un experimento, se puede medir y replicar, y hasta se puede rociar algo con ella. El electrón deja así de ser una entidad teórica para convertirse en algo experimental y real.
